Empatía:
¿Qué es la empatía?
La empatía es la capacidad que tiene una persona de ponerse en el lugar de otra.
Cuando una persona consigue ser empática es capaz de tener respeto por las demás personas, no juzga, tiene mayor autoestima y capacidad para la resolución de problemas.
Algunas características de las personas empáticas son:
Escucha activa: Escuchar a su interlocutor y responden de manera acorde con lo que se está hablando.
Tolerancia: Respeto por las decisiones ajenas.
Sensibilidad: son sensibles con las demás personas y capaces de sentir lo que otros sienten.
Precaución: Hablan midiendo las palabras para no hacer daño a otras personas.
Comprensión: Entienden que cada persona es un mundo y que todos somos diferentes.
No a la dicotomía: La vida no es blanco o negro, existe una gran gama de grises.
Herramientas para fomentar la empatía:
Saber escuchar sin acaparar conversaciones y no estando tan pendientes de nosotros/as mismos/as.
Utilizar el lenguaje no verbal para apoyar a los demás. Una caricia, un beso, una palmada en la espalda…
Utilizar la cortesía. Ceder el sitio, abrir la puerta, dejar pasar…
Utilizar el sentido del humor para restar importancia a los problemas.
No hablar sin filtros. Pensar bien si se puede decir algo que sea ofensivo para la otra persona.
Respetar a los demás. No mostrar aburrimiento, asentir, apoyar…
La empatía nos conecta con las demás personas, pero puede ser un arma de doble filo. Hay que medir nuestra empatía para no ejercerla en exceso, ya que esto podría provocar un descenso en nuestra autoestima. No confundir empatía con sumisión.
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